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15 AÑOS DE HISTORIA DE LA ASOCIACIÓN ATENEO JOVELLANOS

PRESIDENCIA DE DON LORENZO SARMIENTO

En el presente estudio se procede a resolver las incógnitas surgidas a partir de la presidencia de Don Lorenzo Sarmiento entre años 1966-1975. Las fuentes documentales son escasas, se cuenta con las actas de la propia asociación a partir de 1970 y el libro de la historia de la historia de la asociación Ateneo Jovellanos: GALÁN, M. (Cor.) (2003). El Ateneo Jovellanos de Gijón, medio siglo de historia (1953-2003), Gijón, Ateneo Jovellanos. Las actas que corresponderían durante la elección de Don Lorenzo Sarmiento y su presidencia, desde 1964 hasta 1970, se encuentran en propiedad privada de la familia Sarmiento, ya que el dicho presidente falleció en 2012. La problemática de la junta directiva llegó al juzgado de lo contencioso de Gijón.
Para poder conocer los sucesos ocurridos en estas fechas, existen varias noticias acerca de los procesos electorales y problemas financieros de dicha asociación en el principal periódico de la época, La Voluntad, Diario de la Falange Española Tradicionalista y de las J.O.N.S., con publicación diaria desde el 1 de enero de 1937 hasta el 31 de agosto de 1975, editado y publicado únicamente en Gijón.
Don Lorenzo Sarmiento, natural de Gijón, se licenció en derecho por la Universidad de Oviedo, posteriormente se diplomó en la facultad de Filosofía y Letras. Además de su labor como docente, durante la transición española, fue uno de los fundadores de UCD gijonés. Destacó por su papel en la política, ocupando el puesto de máximo responsable en la Consejería de Educación en Asturias y después la Consejería de Comercio, Turismo y Pesca.
Durante su presidencia, la asociación Ateneo Jovellanos sufrió su peor época, con gran desinterés de los socios, escasa actividad cultural y una crisis económica que puso en peligro la propia existencia de la entidad cultural.

La primera noticia acerca de la celebración de elecciones data del 28 de agosto de 1966, donde se relata las elecciones venideras, presentando los candidatos y la necesidad de aprobación del Consejo de socios fundadores.
Extraoficialmente, son cuatro los candidatos que lograron rebasar el mínimo de cien firmas, para poder presentarse como tales, al objeto de cubrir la vacante que dejó señor Buylla. A saber: don Daniel Palacios, don Lorenzo Sarmiento, don Miguel Ángel González y don Ignacio Bertrand, alcalde de la ciudad. (Gofemi, 1966, p.8)
Siguiendo el orden cronológico de los hechos, el 13 de septiembre de este mismo año, el Consejo de Socios fundadores, rechaza la candidatura de don Daniel Palacios, por incumplir el mínimo de años siendo socio. Don Ignacio Bertrand retira la candidatura por la imposibilidad de compatibilizar sus responsabilidades como alcalde de la ciudad y las labores de presidencia de la asociación. Finalmente, se informa sobre las fechas de las elecciones, celebradas en dos convocatorias, el 20 y el 21 del respectivo mes.
El Consejo de Fundadores, se ha significado en la forma debida, dando a conocer a los candidatos que cree oportunos de los cuatro presentados. Los eliminados son don Daniel Palacios, por no tener antigüedad necesaria para su postulación como tal. No obstante, sabemos que ha presentado recurso. Y don Ignacio Bertrand, el cual retira su candidatura, alegando ocupaciones que sin duda tiene. Así pues, los socios del Ateneo Jovellanos, conforme pueden comprobar por los bandos expuestos en el tablón de anuncios, ya tienen candidatos a los cuales votar, los próximos días 20 y 21 del presento mes. (Gofemi, 1966, p.9)
Las elecciones transcurren con normalidad, pero no se nombra presidente, ya que ningún candidato superó los dos tercios del total de votos necesarios para poder ser elegido, de esta forma se refleja en la prensa local el 23 de septiembre.
Cabe señalar el gran número de votos-delegados, que dieron traste a un escrutinio alto don Daniel Palacios, obtuvo 25 votos; don Miguel Ángel González, 130, don Lorenzo Sarmiento, 29% votos. Siete votos fueron presentados en blanco. La mesa electoral levantó la sesión tras señalar la conveniencia examinar los votos, en delegación. No obstante, al no sacar los dos tercios necesarios como suponíamos, no habría presidente todavía en el Ateneo. (La Voluntad, 1966, p. 7)
Se establece para el 17 de noviembre una asamblea general de socios, para poder solucionar esta situación anómala. Sin embargo, se presentaron tan solo ciento sesenta socios de los mil seiscientos que figuran inscritos. Este hecho imposibilita cualquier tipo de elección ya que en los estatus de la entidad se especifica que para poder ejercer el derecho a voto debe haber al menos la mitad más uno de los socios presentes. El ateneo sigue sin presidente.

En la sala se vio escaso público, por lo que, verificada la comprobación de los asistentes con derecho a voto, por el secretario, don Pedro de Lorenzo por cuanto se requiere la mitad más uno de la totalidad de los socios, según dispone el reglamento correspondiente, es decir, ochocientos veintiséis, de los mil seiscientos que figuran inscritos en dicha entidad, al no haber el necesario para alcanzar el «cuorum» ya que sólo se encontraban presentes ciento sesenta, no pudo llevarse a cabo la votación. (La Voluntad, 1966, p.7)
Este largo camino electoral llega a su fin el 22 de noviembre, siendo elegido don Lorenzo Sarmiento presidente, con 590 votos. De esta forma, se da inicio a la primera etapa de presidencia.
El Ateneo Jovellanos ya tiene, por fin, su presidente. Como bien se sabe, las elecciones llegaron a convertirse en una especie de «marathón», desarrollándose durante meses. Finalmente se llegó a una decisión, que llevó a la presidencia a don Lorenzo Sarmiento, quien obtuvo 590 votos favorables, por tres negativos, 83 en blanco y tres papeletas anuladas. (Moran, 1966, p.7)
En este primer periodo de elección, se pueden llegar a analizar la situación del Ateneo Jovellanos. Estas votaciones discurren en un clima social conflictivo en Asturias, con numerosas referencias a huelgas y conflictos laborales en los diarios. El interés y el papel importante que juega esta asociación en la vida cultural gijonesa es clara, ya que cualquier tipo de movimiento o cambio es anunciado en prensa. A su vez, la importancia que presenta esta asociación se puede observar en el número de socios, alrededor de mil seiscientos en esta época. Esta cantidad de socios, facilita de forma económica la calidad de los servicios culturales que ofrece el Ateneo a Gijón, desde conferencias, teatro, música hasta tener un propio equipo de Ajedrez. A pesar de esta situación favorable para la entidad, el largo trámite de elección de presidente, afectó de manera negativa, en este periodo apenas hubo actos culturales. Los socios comienzan a presentar desinterés en este proceso, con ausencias en las asambleas generales, imposibilitando la elección de presidente. En este contexto, es elegido don Lorenzo Sarmiento presidente.
Durante esta primera etapa, desde 1966 hasta 1970, no hubo ningún tipo de problema acerca de la junta directiva, pero si el Ateneo sufre una gran crisis económica. Se puede observar en el artículo del 4 de enero de 1970, donde se informa que la asociación pidió una subvención de 150.000 pesetas al ayuntamiento de Gijón. “Solicitud de ayuda económica por parte del Ateneo Jovellanos, por importe de 150.000 pesetas”. (La Voluntad, 1970, p. 8)

La junta directiva debía haber sido disuelta en diciembre de 1969 por acabar la legislatura, que comprende de 3 años, pero no se convocó elecciones. En febrero se redacta un artículo acerca de esta situación.
El pasado día trece de diciembre finalizó el plazo de mandato de la actual junta directiva del Ateneo Jovellanos. El próximo viernes se cumplirán dos meses durante los cuales nuestra primera entidad cultural se encuentra en un estado anómalo, pues no parece lógico que durante tanto tiempo no haya cesado dicha directiva, ni se establece elecciones para la que ha de sustituir. Durante estos dos meses siguió realizando sus funciones a actual, pues, naturalmente no iba a quedar el Ateneo empantanado por falta de directiva. (Morán, 1970, p. 7)
Estas elecciones se celebraron el 29 de abril, donde es reelegido don Lorenzo Sarmiento como presidente. No se presentó ningún otro candidato. Al día siguiente, se informa en el diario local.
A las ocho de la tarde de ayer en el Ateneo Jovellanos, se celebró la asamblea para elegir nuevo presidente de la Sociedad. Al acto asistieron unos ochenta socios que podrán aportar sus votos y los de otros socios que hubiesen delegado en ellos.
Como único candidato se presentó don Lorenzo Sarmiento, presidente en la etapa anterior, que necesitaba dos tercios de la totalidad de los votantes para ser reelegido.
El señor sarmiento obtuvo 291 votos favorables y 15 en contra, por lo que resultó reelegido para el periodo 1970-1973. (La Voluntad, 1970, p.8)
De esta noticia, a falta de las actas oficiales, se puede deducir que hubo un cambio en los estatus de la entidad. En un inicio, se necesitaba la asistencia de la mitad más uno de la totalidad de los socios, pero en este caso asistieron ochenta socios y se celebró la votación. Cabe la posibilidad que disminuyera drásticamente el número de socios, pero es más improbable, aunque no se puede comprobar. También llama la atención el número de votos emitidos, un total de trescientos y seis votos, con ochenta socios presentes. Por último, se muestra el desinterés que tienen los socios sobre la junta directiva de la entidad ya que no hay ningún otro candidato y una falta total de asistencia a la asamblea general.
Los siguientes tres años de la segunda etapa de presidencia de don Lorenzo Sarmiento discurren en cierta manera tranquilos, no existe ningún problema entorno a la validez de su elección. En estos años, la asociación sufre una gran crisis económica, con gran deterioro de la actividad cultural y su sede. En el año 1973 se debe proceder a nuevas elecciones, don Lorenzo Sarmiento no propone su candidatura.

Existe una confrontación entre el Consejo de fundadores y la junta directiva. Dicho consejo, según los estatutos, debe avalar los candidatos a presidencia. En este punto, ya se conservan las actas originales de las asambleas, se puede conocer de mejor forma lo ocurrido. En el acta del día 25 de marzo de 1974, se asegura que se presentó una lista de candidatos con las firmas necesarias que avalan su posición. Sin embargo, el Consejo, niega tener este listado y así se hace saber a la prensa en el siguiente articulo del día 24 de marzo.
En cumplimiento de los artículos 14 y 22 de los Estatus Sociales se ha reunido el Consejo de Fundadores a las 7:30 del día de ayer, y no habiéndose presentado ningún candidato, a pesar del tiempo transcurrido desde que se hizo la convocatoria, el Consejo estima conveniente no ejercer su derecho a designarlo, prefiriendo retrasar dicha elección para un momento en que sea previsible la presentación de socios que cumplan las condiciones reglamentarias para el cargo, momento que nuevamente se convocará la Asamblea General con tiempo para que se proceda a la presentación de candidatos. (La Voluntad, 1974, p.11)
A su vez, se denuncia en las actas, una reunión ilegal del Consejo de Fundadores, ya que no se informó al presidente, como miembro del dicho consejo. La Junta Directiva, da por valido la presentación de los siguientes candidatos: Sres Meana, Cañada y Liñero. Tras meses de conflicto entre ambos apartados gubernativos, se llega al 3 de diciembre, donde “se propone como candidatos a la presidencia a don Claudio Fernández Junquera y a don Alfredo Liñero”. (Moro, 2003, p. 127)
El 10 de enero de 1975 se celebran las elecciones, presentándose como candidatos Claudio Fernández Junquera y Alfredo Liñero, “el primero de ellos ha obtenido 319 votos y 128 el segundo, hubo 3 votos en blanco. No coincide el número de votos con los socios asistentes pero los candidatos aceptan el resultado”. (Moro, 2003, p. 128)
A partir de este momento, oficialmente Claudio Fernández Junquera es el nuevo presidente del Ateneo Jovellanos. En las actas de la entidad se corrobora esta información, el día 13 de febrero se reúne la junta directiva para informar de los cambios que se van a realizar en la formación de esta nueva junta.
A modo de conclusión, estos 7 años de presidencia de don Lorenzo Sarmiento, no son ajenos a la situación que vive el país. La gran conflictividad social se puede observar también en el seno de la organización, donde se denuncia en cierta manera la politización o no politización de los actos culturales, dependiendo del sector de socios. Este descontento, se traduce en la peor crisis económica que sufrió la entidad, estando a punto

de desaparecer. El papel cultural que ejerce en la ciudad es vital, siendo en mucho tiempo la única asociación permitida, devolviéndole la cultura a un Gijón industrial. Esta importancia es reflejada en el periódico de la época, La Voluntad, donde se informaba de todos los actos culturales y todos los cambios y conflictos que sufre en esta época.

Presidencia Don Claudio Fernández-Junquera

Como fuentes para estudiar este periodo de la entidad Ateneo Jovellanos, las dos presidencias a continuación se cuenta principalmente con las actas de la asociación y el libro anteriormente citado. La prensa en este momento no da cabida a noticias acerca de los movimientos en las presidencias por el contexto que está viviendo España.
En las actas, consta como presidente Fernández-Junquera a partir del 7 de febrero de 1975, en el momento de la constitución de la junta directiva.
En varias noticias anteriores a la asamblea extraordinaria de elección recogen las intenciones de saneamiento de las cuentas de la entidad. En consecuencia, la primera decisión que toma el presidente es la revisión de cuentas a cargo del tesorero, para conocer la situación económica real de la entidad. Acto seguido, Fernández-Junquera comienza a tener reuniones y acuerdos con varias instituciones como la Universidad de Oviedo o empresas privadas como Ensidesa para conseguir subvenciones.
El 21 de mayo de ese mismo año se refleja la cantidad real que adquiere la asociación por medio de ayudas económicas:
• 400.00 pesetas por parte del ayuntamiento de Gijón

• 150.000 pesetas de la fundación cultural Ensidesa

• 100.000 pesetas del Ministerio de Turismo e Información

A su vez, se aumentan las cuotas de socios, pasando de 40-60 pesetas a 50-100 pesetas, a cambio de más actividades culturales.
Todos estos movimientos económicos son necesarios ya que cuanto llegó a presidencia, se encontró con un déficit de 477.000 pesetas.
Finalmente, en junio de 1976 se hace balance de cuentas de 1975 y primer trimestre de 1976, donde se observa la liquidación de la deuda anterior, dejando los ingresos y los gastos en equilibrio. Fernández Junquera consigue el saneamiento de las cuentas de la entidad como había prometido en su elección a presidente. Aun así, que es un logro mayúsculo, que pagos e ingresos estén en equilibrio también es una problemática ya que si surge algún imprevisto o una obra de las instalaciones generará un desequilibrio de las cuentas una vez más.

Insiste en las reuniones de las juntas directivas la participación de la prensa local a la hora de informar acerca los actos culturales. Junto a la Universidad de Oviedo decide crear la Cátedra Jovellanos de extensión universitaria en 1975. Hasta final de su mandato en el 1977, se mantuvo un buen control de las cuentas, convoca elecciones el 6-7 de febrero de 1978, de asamblea extraordinaria, como recoge los estatus de la entidad.

Presidencia de Don Rafael Ferri

El 7 de febrero se celebran las elecciones, teniendo como candidato a Rafael Ferri Montangut, vicepresidente en la etapa anterior. Como novedad, estas elecciones se presentan con papeletas a favor o en contra del dicho candidato. Se obtiene los siguientes resultados “Votos válidos: trescientos doce, votos afirmativos a favor de la candidatura: trescientos cuatro y votos negativos: ocho”. (Muñiz, 2003, p. 144) El 14 de febrero se constituye la nueva junta directiva con Don Rafael Ferri a la cabeza.
Este nuevo presidente no se centra tanto en las cuentas gracias al saneamiento del expresidente Don Fernández-Junquera. Ferri da un nuevo impulso a las conferencias de todo tipo y se inaugura el premio Ateneo de Literatura.
En este periodo surge un conflicto entre la entidad y la Universidad de Oviedo por el espacio del edificio que ocupa la asociación. El origen es la Catedra de Jovellanos en el edificio cultural, un espacio de la propia universidad de Oviedo que en estos momentos quiere sacarle partido.
Se funda el 3 de febrero, 4 días antes de las elecciones a presidente la asociación Antiguos Alumnos de la Universidad de Oviedo. Dicha asociación pide espacio a la entidad “el ateneo facilite a esta nueva entidad dentro del recinto de la Cátedra, oficinas, locales, etc., a fin de que pueda desarrollar sus actividades”. (Muñiz, 2003, p. 148)La cátedra de Jovellanos lleva a cabo actividades culturales, charlas, eventos, reuniones, con gran similitud con la Asociación Ateneo de Jovellanos. En estos momentos parece que hay una doble asociación cultural. Se produce un intercambio de cartas entre el Rector de la Universidad de Oviedo y el presidente, con la negatividad de ceder más espacio a la universidad.
En este periodo la entidad cumple 25 años desde su fundación con una programación especial de actos y visitas de gran calibre.
El contexto de la transición y la nueva etapa que está viviendo Gijón como ciudad, con un renacer cultural extraordinario, la asociación como es de esperar, está a la altura, con numerosas conferencias, bibliotecas, ciclos de cine y apoyo a cualquier tipo de acto cultural que se vaya a celebrar en Gijón.

“Se mantienen las secciones habituales de actividades de gran proyección: la Biblioteca, Conferencias, Exposiciones, Música, Cine-club, Teatro, Turismo cultural y Revista Audiovisual”. (Muñiz, 2003, p. 158)
En el acta de la Asamblea general del 12 de marzo de 1981 se acuerda la elección de un nuevo presidente y Junta Directiva en Asamblea extraordinaria. A pesar que no se cubre noticia acerca de estas elecciones, en el libro de actas a partir del 12 de junio de 1981 figura como presidente de la entidad Pedro Luis Menéndez Gutiérrez. Se puede deducir que en el mes de junio se celebraron estas elecciones.
A partir de este momento, el Ateneo entra en una nueva etapa, más estable, a concordancia con la situación política de España. Una época marcada por la cultura y grandes actos, la estabilidad económica y de la entidad. A esta situación positiva no se hubiera podido llegar sin el esfuerzo de Fernández-Junquera y Ferri, que juntos trabajaron por el bien del ateneo durante 6 años, salvándolo de la quiebra económica.

Trabajo realizado por Ane Querejeta Somoano, becaria de prácticas externas de la Universidad de Oviedo, estudiante de cuarto curso del Grado de Historia.
20 de Abril de 2021.

 

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